Tu indiferencia duele,
puedo sentir el frío
adentrándose por cada poro de mi cuerpo
silencioso hasta llegar
al lugar donde nace todo.
Si pudiera entrar ahí
acabaría con tu recuerdo de raíz.

Tu inteligencia aturde,
puedo sentir el asco
que pasea por tus palabras cuando hablas con alguien
que no piensa igual que tu.
Y al final vas a estar tan sola.
Si pudiera rebobinar
solo serías un mal recuerdo que olvidar.

Porque no queda nadie a quien culpar de tus problemas,
no queda nada aquí que puedas destruir.
Mentira tras mentira has levantado un gran palacio
donde llevas a tus presas antes de ser devoradas.
Recuerdo con detalle todas tus sucias palabras.
si tu piensas que esto es estar bien,
es mejor dejarlo.
Para, para, ¡PARA!

He recordado un día en concreto que te empezaba a conocer
fuimos al parque, trajiste comida, el corazón se me iba a salir.

Y nos tumbamos en la hierba mojada, era un intenso atardecer
y compartimos tus auriculares. Yo era importante para ti.

Y no lo sabía, pues era un cobarde, que nunca quiso hacerte sufrir.
Todos mis miedos, todos mis fracasos irán conmigo hasta morir.